El temor de los maestros a las nuevas tecnologías

Como parte de las conferencias enmarcadas en el tercer y último día del 9 Encuentro “Problemas Lingüísticos, Literarios y pedagógicos de la Enseñanza del Español en México”, se presentó la conferencia “El reto de enseñar redacción en el siglo XXI”.

La plática estuvo a cargo de Rosa Cecilia Trejo, docente de la Unidad Académica de Letras de la Universidad Autónoma de Zacatecas.

En su exposición, la académica manifestó que como profesores se enfrentan a tres retos: el uso de las tecnologías, el desconocimiento de una historia educativa, política y social “de la cual somos producto por parte de los alumnos”, y el desconocimiento de que los tiempos están cambiando.

“No se pueden utilizar los mismos mecanismos y la misma manera de dar clase; la pedagogía tiene que cambiar”, comentó.

La ponente señaló que las políticas educativas se deben dosificar desde la familia, luego en la preparatoria, pero sobre todo a nivel profesional, “hay que hacer que los alumnos entiendan qué es una universidad, de qué depende, cuáles con los recursos con que cuenta, para qué sirven los impuestos que pagamos, de dónde viene el derecho a la educación”.

Por otra parte, la conferenciante expresó que el aula de clases ha cambiado en los últimos años, “hoy en día se han incorporado desde teléfonos celulares hasta los más pequeños y sofisticados equipos de sonido, así como computadoras personales para el uso de Internet y las redes sociales.

Ante esta situación, Rosa Cecilia Trejo dijo que hay que mejorar las capacidades intelectuales mediante los avances de la tecnología, y como docente buscar los mecanismos para encontrar en Internet lo que sirva, y así “enseñar al alumno a discernir entre lo que hay en la red”.

Otra forma sería el conocer las páginas donde se encuentran artículos o revistas que llevan una complejidad mental, para que los alumnos las consulten.

Sobre la renuencia de algunos docentes en la utilización de las nuevas tecnologías, señaló que se debe al “miedo” y a una formación que no implicaba la dedicación que requiere el empleo de estos recursos en el aula de clase.

“Hay que estar a la altura de los jóvenes, ya que ellos sí le dedican tiempo a estas tecnologías”, dijo.

Acerca de la problemática que viven los jóvenes universitarios -y que viene desde la primaria- en el sentido de no saber leer textos científicos, Rosa Cecilia Trejo Acuña comentó que esto se contrarresta utilizando los nuevos mecanismos de la lingüística aplicada.

En ellos, explicó, hay un proceso de “desaprendizaje”, que consiste en hacer consciente al alumno de que muchas de las cosas que aprendió pueden ser valores o prejuicios, y él mismo debe conocer sus resultados.

“Algo fundamental es el autoconocimiento del alumno, que vea para qué le sirven las cosas y qué es lo que está necesitando”, puntualizó.